¡al agua, sabandija!
Cuentan que san Patricio, allá en Irlanda, acabó con una reptante plaga de serpientes. Unas versiones cuentan que las mando al mar para que se ahogaran, otras que simplemente les ordenó despeñarse. No importa el método de exterminio, lo único cierto es que todo esto de las serpientes es alegoría del fin del paganismo de un pueblo, así como el trébol de 3 hojas es la alegoría de la Trinidad.
Hoy, día de san Patricio, se conmemora su muerte que sólo es pretexto para celebrar y revindicar LO irlandés. En su fiesta, el santo va acompañado por otros símbolos paganos: duendes, tréboles de cuatro hojas, arco iris, verdor. Pero lo que asombra es que sea estandarte de una identidad firme a fuerza de yugos, guerras, catástrofes y un espíritu tenaz. Paradójicamente, este santo no fue irlandés .
Hasta aquí el verde. Y enfin, ahora que encuentre a mi mecenas, y de regreso de San Petersburgo, iré a Irlanda; mientras, buscaré un trébol de cuatro hojas en las banquetas y dejamos flotar a Seamus Heaney, poeta irlandés:
Estirpe
I
Emparentado por el jeroglífico
de turba en un abierto campo
con la víctima estrangulada
nido de amor en el helecho,
penetro en los orígenes
como el perro da vueltas
a sus recuerdos ancestrales
sobre la estera en la cocina:
se agita el suelo del pantano,
pía y cecea el agua
mientras piso al andar
juncos y brezo.
Amo esta faz de hierba,
sus negras incisiones,
los secretos recónditos
de procesos y ritos;
amo la primavera
que brota de la tierra,
de cada terraplén pende una horca,
cada charca
la desatada lengua
de una urna, bebedora de luna,
no para ser sondada
por el ojo desnudo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario