jueves, abril 27, 2006

"cumplir es mi fuerza"

Y están los creativos, y de entre ellos destacan los "creativos-plan-emergente" o CPE. Los CPE han aprendido su lección: saben, con certeza divina, que para llegar al trono se necesitan votos. Muchos, votos, miles de votos, exceso de votos. El número de votos equivalente al número de gente jodida en el tercer mundo. Y se aplican, los CPE, y dirigen sus humores creativos a dar esperanza al jodido. Aunque el jodido lo será hasta el fin de los tiempos. Y crean, ¡oh sí, son "creativos"!, frases contundentes:

"Por el bien de todos, primero los pobres"

Y el presidenciable aplaude y celebra.

Pero están los no tan jodidos, la simpática e ilusa clase media que aún cree en las leyendas de los 60 que sentenciaban: los comunistas comen niños. Y la simpática e ilusa clase media se aflige, se asusta y se persigna.

Y el presidenciable grita y apaña al creativo. Para apañar el trono se necesitan más y más votos.

Pero están los CPE y, lógico, su plan emergente. Ellos dedican días enteros para alimentar su "creatividad": van al cine, comen palomitas, van otra vez al cine y comen más palomitas. Y lo logran. Crean frases contundentes de amplio espectro:

"Cumplir es mi fuerza"

Y el presidenciable aplaude y celebra.

pd: Y recuerde, en las próximas elecciones, si usted da su voto a la patética izquierda mexicana recibirá sin costo alguno un afiche decorativo que brilla en la oscuridad para que ilumine sus ideas.



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martes, abril 25, 2006

"Por un México con manos limpias"

Y están los "creativos", esos entes que trabajan, elucubran, diseñan, meditan y, enfin, crean. De las diversas especies de "creativos" (que las hay ¿no?), los que me parecen "fascinantes" son los "creativos de campaña presidencial".
Para que usted, aljibeño ordinario, pueda aspirar al mentado nicho evolutivo (o sea, el de "creativo de campaña") debe poseer o llenar cualquiera de los siguientes requisitos:

1. Ser el compadre, compinche, carnal, amiguito o brother del Presidenciable o de cualquier otra alimaña del cónclave presidenciable.

2. Estar urgido de lana (o sea ávido de papel moneda) y aceptar, con gran reverencia, las ideas súper del presidenciable o/y de cualquier alimaña del cónclave presidenciable por muy estúpidas que sean.

3. Tener título de gran maestro "creativo" aunque en realidad sea usted un mediocre pero muy astuto para "hacerse de renombre".

4. Tener la divina capacidad de crear (usted es un "creativo") el lema de la campaña, tras una noche de juerga y aún con resaca, frente al lavabo (sí, porque usted aprendió de pequeño, tan brillante usted, que hay que lavarse las manos antes de comer y después de ir al baño).

Y eso es todo.

pd: Y recuerde, en las próximas elecciones, si usted da su voto a la patética derecha mexicana recibirá sin costo alguno una pastilla de jabón multiusos, hipoalergénica y con alohe para que humecte sus ideas.



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domingo, abril 23, 2006

El apocalipsis según San Plátano



San Plátano ha muerto. Creo que para los bananistas, cronológicamente hablando, esta temporada equivale al ya lejano siglo veinte. Nada. No más pieles amarillas, rezos resbaladisos, rosarios de banana split (¿así se escribe, jijos?). No más potasio en nuestras almas, no más imágenes alegóricas y sugerentes. Nada: Saint Banane est mort. ¿Que cómo lo sé? Por el silencio perpetuo que rodea los días. Estoy callada, silenciada, dormida. Y como un silencio no es suficiente me he dedicado a amordazar todo con cinta adhesiva. hasta el inútil de Roderico fue víctima de 24 vueltas y media de mi super Scotchgard (¿maldición, ¿lleva dos as?).
Y nada, el apocalipsis es cool, es algo así como la anestesia, como vivir flotando dentro de un jarrón de salmuera.
Sin embargo vuelvo luego existo, aljibeo luego existo, desempolvo mi teclado y luego, muy muy luego existo. Voy a preparar globos, confetis y Baileys pues este lugar cumplirá 3 años. Y no solo este, sino otros, todos esos lugares que visito y leo, sí, muchos de ellos desde hace 3 años.
San Plátano ha muerto pero traigan el cuerpo pa que celebre...

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viernes, abril 07, 2006



Creo que este conejo resulta terapéutico; con su alegre frenesí, su sonrisita "los amo a todos" y el absurdo en el cascarón colorido (nop, los conejos no nacen de un huevo) ayuda a no tomarse las cosas tan en serio.
Supongo que estoy de regreso de ningún-lugar: ya no tengo sueño, le saqué brillo a la casa y, al fin, monté la pecera que me donó Rax. Montada a medias, faltan unos últimos ajustes para rellenarla de peces y escuchar el bubblebubblebubble mientras una intenta terminar los trabajos pendientes. Está cool la pecera, tenía todito, hasta una momia submarina...
Ni hablar, ya regresé. Hasta recuperé mi graciosa ira, justo ayer, cuando ciertos eventos me hicieron encabronar. La paciencia y la tolerancia dan frutos torcidísimos.
Qué sabroso sentirse vivo, casi tan vivo como el conejito de pixeles que flota hoy en este lugar.
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