lunes, noviembre 27, 2006

mensaje de Roderico



Mi muy estimado y honorable ciudadano Ulises Ruiz:

¡Lárgate de Oaxaca!


lunes, noviembre 20, 2006

A quien corresponda



"¡No me venga! Y que no se le ocurra lanzar vítores revolucionarios que no le van. Si desde aquí lo veo contemplándose en el espejo, sintiéndose el chile de todos los moles porque usted sí fue a la escuela y tiene su título universitario y cree que se las sabe de todas, todas. Y habla inglés y toma vodka de sabores, pero eso sí, cuando lo inn es ser mexicano agarra su caballito y chupa limón y se echa su tequilita de Hidalgo. Y se dice de familia bien, de gente educada y a la mínima provocacion nombra "naco, ¡indio!" al que se le ponga enfrente. Así que ¡no me chingue! Deje ya de vitorear nombres y fechas, deje de hacerse el revolucionario porque las únicas revoluciones que conoce son las de su pinche coche con el que arrea a los muertos de hambre que van a pie ¿o qué? ¿cree que no lo he oído? ¿cree que no lo he visto? No vitoree, mejor alegrese de que hoy es día feriado y puede quedarse en su casa de huevón. Usted cómase unos tacos para que se sienta bien mexicano y deje que otros sueñen, que la revolución no es para usted, ni por usted. Y no se le olvide que vive en un país tercermundista de analfabetas, salarios mínimos y mochería, ya se lo dije, ¡cállese de una buena vez! ¿Qué? ¿No le gusta mi tonito? ¿Usted es puro como las hostias? ¡pues remójese en vino, quién quita y se ahoga de una buena vez...!"

tan-tán

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martes, noviembre 14, 2006





¡Oh, sí!, todavía hacemos libritos y a ratos hasta los publicamos. Toca turno a los gusanos. Va post de promoción-invitación:

"El sueño de las larvas"
de Erika Mergruen

Presentan:
Miguel Ángel Galván
Alberto Chimal
Enrique Alfaro (moderador)

Miércoles 15 de noviembre, 19 hrs.
Casa del Poeta, Bar Las Hormigas.
Álvaro Obregón 73, col. Roma, México, D.F.

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domingo, noviembre 12, 2006

Siempre hay una primera vez

"Siempre hay una primera vez" pertenece a ese grupo de frases y dichos que intentan consolarnos, o justificarnos. Ayer la empleamos, aquí, en la cocina de la colina, cuando abrimos el horno después de una hora y media para descubrir que el pastel se había suicidado. Y claro, los suicidios sólo ocurren "una primera vez". La rejilla del horno se cayó, y junto con ella el molde del pastel, y junto con él la masa del pastel.
Y el aljibeño promedio se preguntará: "pues que no olía a quemado". No -contestaré. Aquel flujo piroplástico encontró camino. Primero en los huecos más recónditos de las paredes del horno, después por los agujeros del piso del mismo. El resultado fue la sorpresa al descubrir un molde ladeado con los vestigios endurecidos de una masa chocolatosa.
"Siempre hay una primera vez" -exclamamos a coro. Pero este estúpido consuelo no parecía suficiente para mi hijo cumpleañero. Ni me quitaría mi encabronamiento. Preparé el pastel, una vez más, y sacrifiqué un par de tabletas de chocolate suizo (el de repostería era miembro honorario del suicidio).
Al final del día celebramos el cumpleaños con una receta "mejorada" de pastel de chocolate. Y del suicidio sólo queda un testigo: un inmenso charco de masa de chocolate bajo el horno que algún día alguien tendrá que limpiar.
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jueves, noviembre 02, 2006

El Altar



Ja. El iluso del Roderico se la ha pasado toda la madrugada bailando danzón. Cree que hoy es su fiesta: El Día nacional de Roderico, el fiel. Por todos lados ve su efigie, la admira, la venera. Y baila danzón con desenfreno, machacando con sus zapatos de charol las flores de la ofrenda. ¡Ah, qué bonito el mundo de los muertos! ¡Ah, qué bonito el mundo de los vivos!
Yo me largo a apagar las veladoras para evitar incendios y para obligar a mi mayordomo que se duerma: ya le puse una almohada y un zarape sobre el pan de muerto.
No olviden leer sus calaveritas... y si se ofenden no es mi culpa, ni de los autores, quién les manda defender banderas y colores insulsos. Aquí, en este méndigo aljibe, puro limbo, pura grisura, puro danzón apolítico con el Roderico.

Tan-tán
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